En 1880, durante el Porfiriato, las familias más adineradas de la Ciudad de México empezaron a mudarse hacia la hoy conocida Zona Rosa, imitando el estilo de las ciudades europeas, con chalets y mansiones eclécticas características de la época. Era tanto el deseo de esas familias de alcanzar ese status quo que incluso se decidió que los nombres de las calles debían ser los de importantes ciudades del viejo continente; hasta la fecha se conserva esa nomenclatura.

Durante la década de los años 1950, decaídas mansiones empezaron a usarse como cafeterías, galerías de arte, restaurantes, bares y boutiques. En algún momento se volvió el lugar predilecto por los intelectuales para reunirse.
Aquí vivió la poetisa Pita Amor así como el escritor Juan José Arreola y muchos bohemios más, acompañados de una gran efervescencia artística.


Corredor Turístico del Paseo de la Reforma, CDMX, México
Crédito: cdmx.com

Después de los Juegos Olímpicos de México 1968 y la Copa Mundial de Fútbol de 1970, el éxito de la colonia se disparó, haciéndolo un punto de interés turístico fundamental de la ciudad.

Llegó el año 1985 y con él un terremoto que devastó la ciudad, derrumbando edificios en muchas zonas; entre ellas la Zona Rosa. En lo que esta se recuperaba, muchos de los habitantes adinerados se mudaron a Polanco, pero esto no fue malo: todavía no empezaba la década de los 1990 cuando esta zona ya tenía integrada a la comunidad gay de la Ciudad de México; sus bares y restaurantes no discriminaban a nadie por su apariencia, preferencia sexual o expresiones afectivas.


Crédito: twenty20photos

Actualmente la calle Amberes cuenta con la mayor concentración de establecimientos lgbt de toda la ciudad, aunque a diferencia de Chueca en Madrid o Castro en San Francisco, los negocios no son exclusivamente para la comunidad, generando así una sensación de más diversidad.

Hoy esta zona es parte del denominado Corredor Turístico del Paseo de la Reforma. Gracias a la cantidad de boutiques, hoteles, bares, restaurantes, galerías, estudios de tatuaje, cafés y librerías, es uno de los espacios más visitados de la ciudad.


Ángel de la Independencia, CDMX, México
Crédito: cdmx.com

Además de todo lo que esta zona ofrece, está justo en un punto de la ciudad privilegiado para los turistas, pues muchísimas atracciones están a solo unos minutos de distancia, como el Bosque de Chapultepec, el Ángel de la Independencia, la Fuente de la Diana Cazadora y el paseo de la Reforma.

Así que no solo es el spot lgbtiq+ de la ciudad, también un espacio lleno de interesante historia, arquitectura diversa y entretenimiento que dura toda la noche… ¡o hasta el día siguiente! 

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